septiembre 29, 2010

Dime qué buscas... y te daré la excomunión

Esta vez no vamos a hacer una lista. Esta vez vamos a ponernos de pie (vamos, a ver, usté también que lo estamos esperando) para ovacionar al humanoide que, en un ataque de  rabia, desesperación ante la vacuidad de la existencia o -lo que sería mucho peor- en pleno uso de sus facultades escribió la frase que sigue en Google (y Google, que es todo compasión lo mandó al blog de la que suscribe)

"en el nombre de dios me cagare en la inmunidad de las iglesias"

Querido homúnculo blasfemo y pecador: no sabemos qué catzos intentabas conseguir al tipear semejante frase en un buscador de internet. Si querías desplegar toda tu bronca acumulada en contra de la institución eclesiástica, te recomendamos dirigirte a cualquier diario online y comentar alguna nota al respecto. Allí homúnculos de toda laya, estarán dispuestos a responder a tus exclamaciones de ira con insultos a granel. Incluso puede que te maldigan para toda la eternidad.
Si buscabas una respuesta, no entendemos cuál es la pregunta.
La "inmunidad de las iglesias" nos suena a que los vampiros no pueden pasar de la puerta, pero dudamos que te refieras a eso. 
Lamentamos que hayas terminado en estas páginas, así es Google. Será muy grande y muy omnipresente pero no tiene todas las respuestas.
Para eso dicen que está Dios. Pero, después de lo escrito, dudo que te vaya a devolver el llamado.



septiembre 22, 2010

Alienado, pero con estilo

Ya dijimos que no estamos a favor de los homúnculos que, escudados detrás (o en el centro) de unos auriculares roñosos, van por la vida como zombies. Pero, si insisten en hacerlo, por lo menos que esos auriculares no sean una porquería. 

De nada. 

Este es otro servicio de Ciberviviendo, un blog ELEGANTE.

 
 

Bueh, los últimos no serán muy elegantes, pero no me digan que no son originales.

septiembre 17, 2010

Test: En tu primera cita, ¿eres un bodrio de persona?

Responde estas simples preguntas y averigua por qué tus primeras citas son una verdadera porquería.

Ustedes se conocieron:
a. Por internet, a través de un conocido que te juró por su madre que esa persona "está hecha para vos" y te mandó sus datos.
b. Por internet, a través de uno de tus 300 amigos de facebook, que no sabes quién catzos es pero que te juró por su abuelita moribunda que esa persona "está hecha para vos".
c. A través de una página de citas en la que te describiste dejando volar demasiado tu imaginación, por lo que la otra persona espera encontrar un modelo de tapa de revistas (y lo que no sabe es que la revista se llama "Pesca con mosca 2010".)

¿Qué lugar elegís para el primer encuentro?
a. Un bar, que tenga internet wifi así puedo twittear lo que está pasando.
b. Un Mc Donalds, y después una caminata por la plaza. 
c. Un restaurante o bar, pero que esté en penumbras o casi a oscuras.

¿Cómo solés vestirte para la primera cita?
a. Elegante: con la corbata de Homero Simpson tomando cerveza que te regaló tu mejor amigo.
b. Como siempre: pantalones fluo, una remera larga y las zapatillas con lucecitas.
c. Con lo mismo que uso hace 15 años: remera negra, pantalón negro y zapatos (marrones).

Durante el encuentro se produce un silencio incómodo. ¿Con qué tema salís de él?
a. Le muestro mi Ipad de última generación, y le cuento las últimas novedades del campeonato de Playstation que jugamos con mis amigos todos los fines de semana. 
b. No sé, el ruido ambiente rellena el silencio solo. 
c. De la última operación de caderas que debieron hacerle a tu madre, que vive con vos (y te llamó 4 veces durante la noche.)

El celular: 
a. Lo dejás arriba de la mesa y lo usás cada cinco minutos para twittear, actualizar el facebook y/o mandar mensajes de texto.
b. Lo dejás arriba de la mesa y lo usás cada cinco minutos para twittear, actualizar el facebook, mandar mensajes de texto, y/o jugar. 
c. Lo dejás arriba de la mesa para atender a tu madre.

Está llegando al final del encuentro, ¿qué otro plan propones?
a. Ir a tu casa a jugar a la Wii.
b. Ninguno, se me acabó la plata.
c. Te invitas a la casa de la otra persona, porque en tu casa está tu madre. 


Mayoría de respuestas A: Hace 35 años que te preguntas por qué tus citas no funcionan. La respuesta es simple: eres un nabo a cuerda. 
No todo el mundo tiene que estar enterado de lo que es el "Halo Reach", cuál es el enemigo mortal de Linterna Verde, y cómo se hackea al pentágono. 
Pasar todo el fin de semana encerrado con un grupo de homúnculos glotones y medio borrachos jugando a la playstation no es un programa potable para nadie, a excepción de los susodichos homúnculos. (Los mismos que te presentan gente al grito de "está hech@ para vos", lo que generalmente significa "está desesperad@".)

Mayoría de respuestas B: Eres un púber imberbe con flequillo que todavía no sabe nada de la vida. Si sigues por este camino te auguramos largos tiempos de soledad, o bien, encontrarás la felicidad junto a un Tamagochi. 
Si tienes más de 17 años, eres un nabo a contramano que merece el cadalzo por ridículo y miserable. Te recordamos, querido homínido con síndrome Peter Pan, que la adolescencia llega a su final el día en el que tus padres te echan a patadas de tu casa al grito de "andá a trabajar, pedazo de boludo grandote, y dejá de jugar a la Xbox o te rompo la crisma a patadas."

Mayoría de respuestas C: Lamentamos comunicarte que tu madre tiene razón cuando dice que se va a morir sin verte casad@. Eres un homúnculo inseguro, (que tu madre te diga permanentemente lo feo que eres no te ayuda, debemos reconocerlo), medio estúpido y  un poco amarrete. Pero ánimos, todo puede solucionarse.
Por tu bien y el de la humanidad que te rodea, es hora de que tomes una decisión: salí al exterior, alejate de tu madre, comprate ropa y no le atiendas más el teléfono, o bien, envenenala lentamente para cobrar la pensión (en cuyo caso la vieja podrida seguirá teniendo razón: se morirá viéndote solter@, pero feliz.)

Este fue otro servicio de Ciberviviendo, para hacer de este mundo un lugar más romántico.


 



 

septiembre 13, 2010

25 años entre hongos y flores carnívoras

Hoy cumple años Mario, ese muñequito petiso y narigón, de bigote tupido y enterito azul que todos hemos hecho saltar entre cañerías, plantas carnívoras y otros peligros.
Como no podía ser de otra manera, Ciberviviendo saluda a este clásico de los video juegos, que nos ha entretenido durante tanto tiempo, y que sigue vigente, sin que se le llene de canas el bigote.

Sólo queremos agregar que Luiggi jamás le llegará ni a los talones (aunque sea más alto) y que la princesa siempre nos pareció un poco creída. 

Les dejamos un video, al estilo Family Guy, del ecuentro entre el plomero más famoso del mundo, y su princesa.
Y aquí, una entrevista con su creador (que parece más joven que su criatura!!).

Salut!



septiembre 08, 2010

Vintage

Una serie de posters estilo vintage sobre las redes sociales más conocidas, hecho por una agencia de publicidad en Brasil, con motivo de un seminario.
Increíbles.

Fuente

septiembre 06, 2010

Cuatro verdades nobles. Hoy: el contestador telefónico

1.Mejor callate
El 85% de los homúnculos enfrentados a la ardua tarea de dejar un mensaje en un contestador teléfonico, sufren de una anomalía neurológica repentina que los convierte inmediatamente en primates carentes de volcabulario comprensible. 
Por otro lado, la cantidad de latiguillos inútiles (como "eeeeh", "bueno", "llamame cuando puedas", "estemmmm") utilizados por el mensajeador es directamente propocional al nivel de estupidez que le aqueja al momento de  grabar el susodicho mensaje.
 
2. ¿Qué dije qué?
Debido a esta rara afección, el 60% de los humanoides anteriormente nombrados no recordarán qué catzos dijeron durante la grabación de su discurso oligofrénico. Gracias a la tecnología, estos propaladores de oraciones sin sentido podrán escucharse y regrabar la comunicación hasta quedar conformes con el resultado. Cosa que no sucederá jamás, ya que el nivel de sandeces emitido por segundo es directamente proporcional al número de intentos por decir algo más o menos entendible.
 
3. ¿Lobo está?
El 45% de los dejadores de mensajes, en especial si se trata de amigos desubicados, novios paranoicos y/o madres, ocuparán todo el tiempo de grabación preguntándole al destinatario de la llamada si se encuentra en la casa. Se trata del famoso mensaje "si estás ahí etc."
En el 90% de los casos el destinatario de la llamada  efectivamente estará ahí, realizando alguna tarea mucho más entretenida que hablar con su amigo desubicado, su novio paranoico y/o su madre.  
Los humanoides que comienzan sus mensajes preguntando "estás?" deberían sufrir la caída inmediata de un rayo sobre sus cerebritos (ya de por sí quemados). Y si son de aquellos que llaman repetidas veces, porque no le "creen" al contestador, directamente merecen una muerte lenta y dolorosa. 

4. No hace falta que demuestres tu idiotez, ya te conocemos
Cuanto más "gracioso", "divertido" y/o "original" es el mensaje de bienvenida de tu contestador, mayor es tu grado de imbecilidad.
Entre los grabadores de mensajes idiotas que merecen el cadalzo se encuentran: la parejita melosa recién mudada que todavía no conoce las hieles de la convivencia, y graba el mensaje a dúo; el nabo que se gasta 5 pesos más IVA para tener la voz de un Homero Simpson aquejado de fiebre tifoidea  en su contestador; pero por sobre todas las cosas, el homúnculo que graba un "hola" seguido de un silencio para reirse a costa del que llama (que cree haber sido atendido en vivo y en directo). 
Todos esos humanoides deberían ser encerrados en una cárcel de máxima seguridad en la que sólo escuchen el ruido de sus propios mensajes durante lo que les resta de vida.

septiembre 03, 2010

La pinta es lo de menos, shalala

El señor de la izquierda, con esa cara de nabo que apesta, ha sido declarado la persona más influyente del momento. Más allá de la importancia de semejantes rankings, o lo poco que nos importan a nosotros, pobres mortales que no tenemos ni dos pesos en el bolsillo; hoy queremos hablarte a tí, oh púber imberbe que lees este blog e intentas tapar con maquillaje ese acné juvenil que te tanto trauma, o que haces muecas extrañas para disimular tus ojos de huevo. 
No escondas tu raquítica figura detrás de una remera tres talles más grandes, no te quejes de esa nariz de loro que la genética te ha dado.
Deja de darle importancia a los apodos que te adosan tus compañeros de clase. No importa si sos conocido como "sifón", "cuatro ojos" o "mes de verano" (porque no tiene días frescos). 
Tú puedes. 


Ellos, con esos rostros tan poco agraciados también pudieron.
Sólo hace falta esfuerzo, inteligencia, un poco de suerte... y  preferentemente  no se te ocurra nacer en un país pobre y tercermundista. 
(Queremos motivarte, pero tampoco te vamos a andar mintiendo.)




Este fue otro servicio de Ciberviviendo, por una juventud emprendedora, pero realista.