julio 10, 2009

Razones por las que la Wii puede hacer su vida aun más miserable

La consola de videojuegos Wii es uno de los últimos desarrollos tecnológicos de Nintendo, creado supuestamente para hacer nuestra existencia más entretenida y excitante.
Desde este blog, sin embargo, queremos denunciar la potencia destructiva de lo que aparece como un inocente aparatito blanco con controles acolchaditos. Por ello, y sin temor a la censura del gigante industrial de videojuegos (por la nula importancia que tienen nuestras palabras para esta gente, y para el resto del mundo) demostraremos, mediante un listado de seis razones, por qué la wWi puede hacer su vida aun más miserable.
Después no digan que no les avisamos.

1. Su hogar se convierte repentinamente en un jardín de infantes (y usted en esa maestra histérica y resentida que siempre aborreció)

Usted, que nunca comprendió la fijación malsana de la gente en querer reproducir la especie, verá con asombro cómo de un día para otro el living de su casa comienza a llenarse de sobrinitos, vecinitos, o cualquier otro homúnculo en diminutivo, deseoso de usar su Wii.
Como resultado perderá el poco equilibrio mental que luchaba por conservar, y verá destrozados sus más preciados valores (porque ningún niño entenderá jamás la frase “eso no se toca”). Además, verá acumularse la mugre en los mandos del aparato y en el resto de la casa en forma de manchas de dulce de leche sobre los sillones, pedazos de pizza debajo de los muebles y restos de mcnífica en el cajón de su mesa de luz.

Este escenario se repetirá en el caso de que usted ya haya llevado adelante esa fijación malsana de querer reproducir la especie y tenga entre sus efectos personales un pequeño humanoide que se le parece, y que se encargará de invitar a su casa a todos sus amiguitos pobres (o cuyos progenitores no claudicaron ante los aullidos pedigüeños del niño) que no tienen Wii en su casa.

2. De pronto su popularidad crece entre sus amigos y conocidos
Los semihumanos que tiene por amigos, enterados de la nueva adquisición, comenzarán a aparecer en la puerta de su casa, con el estómago, los bolsillos y las manos vacías (como es su costumbre) para llevar adelante campeonatos maratónicos de, póngale, Bowling. Esta situación lo alegrará al principio.

Lamentamos decirle que al poco tiempo usted recordará por qué decidió dejar de ver a esos desubicados después del viaje de egresados. Pero ya será tarde.


3. Su casa no sólo no está en orden, está en ruinas
Al malón de humanoides grandes y chicos que ahora pasan por su hogar para hacer uso de la consola y el resto de las instalaciones, con el consiguiente desastre que ello supone, se sumará la irrefrenable estupidez de muchos de ellos (usted incluido) que:
a-No se ponen la correa del mando a distancia, cuyo extremo termina incrustado y haciendo pedazos la ventana, el televisor, o ese jarrón de la dinastía ming que usted añoraba vender por millones.
b- Se ponen la correa del mando a distancia pero en su infinita imbecilidad realizan movimientos tan exagerados que un inocente juego de béisbol puede terminar con todos los adornos, lámparas y el mismo televisor hecho añicos. Este tipo de jugadores incluso puede lesionar a los demás, rompiendo a su paso extremidades ajenas.

4. El consorcio decide desalojarlo de su departamento
Es comprensible que sus vecinos se quejen ante la administración por los ruidos molestos que provienen de su departamento. Incluso la vieja sorda del piso superior puede escuchar los vítores, imprecaciones y puteadas de toda laya que usted y/o sus acompañantes profieren a cualquier hora, cualquier día de la semana, mientras desarrollan sus sesiones Wii.
Sépalo, la gente no es muy compresiva, y menos si la excusa del griterío proveniente de su casa es que usted acaba de convertirse en profesional del tenis en el Wii Sports.

5. Su obra social lo desafilia y en el hospital público lo muelen a trompadas por imbécil
Es normal, a estas alturas, que usted pase cuatro o más horas frente a la pantalla jugando al Top Spin. También es normal que esa masa informe de carne que sólo desplaza de la cama al living y del living a la computadora y que usted denomina “cuerpo” se resienta frente a tamaña actividad.

Lo que no es normal es que usted aparezca cada siete días en la sala de guardia con el brazo derecho totalmente inutilizado por el dolor (o cualquier otra afección del estilo) y le comunique muy campante a su médico que se lo lesionó jugando a la Wii. Tampoco llame al trabajo y diga que no puede ir por esta causa.


Por favor, por su salud y la del resto del mundo mienta (y cuando juegue, deje de creer que es Federer. No está jugando la Roland Garros, está jugando un videojuego, por lo tanto, realice movimientos acordes, ¡por todos los santos!)


6. Usted pierde el poco respeto que le tenían en su comunidad
Todo lo anteriormente descripto se va sumando poco a poco en un fichero imaginario con su nombre y apellido y cuyo titulo es “razones por las que no se debe dirigir la palabra a este humanoide”.

Pero, hay algo que lo conduce directamente a la cima de la ridiculez y la carencia absoluta de vergüenza: la Wii Fit.
Usted se ha percatado de que esa masa grasienta que denomina cuerpo tiene el estado muscular de una ameba. Entonces, como es coherente con su forma de (no)pensar, decide que lo mejor que puede hacer es adquirir el implemento para hacer ejercicios de la Wii llamado Wii Balance.
A partir de ese momento, sus amigos, vecinos y familiares podrán asistir de manera gratuita a los siguientes shows en vivo: “sesiones de yoga de un tronco con forma humana”, “ejericicios aeróbicos de un borracho con alzheimer” y “demostraciones prácticas de lo que la radiación del celular y la comida chatarra provocan en el sistema nerviosos del hombre medio”.

Hágase un favor, si se compra la Wii Fit no comparta la noticia. Y cuando la use cierre todas las ventanas. Si usted carece de todo sentido del buen gusto, nosotros no tenemos la culpa.


Este ha sido otro servicio de Ciberviviendo para la comunidad.
Hasta la póxima, nos vemos prontos!

7 comentarios:

Anónimo dijo...

tan bestia soy que no se que es una wii...pero me lo imagino.
me hiciste reir con tu relato de las desgracias que trae este aparatejo.
Muy bueno.
un beso

Ajenjo dijo...

Tenés toda, absolutamente toda la razón, el desfile de interesados y ventajeros, la demolución progresiva del hogar, los dolores musculares, el vicio, todo, todo, todo, pero... quien te quita lo bailado :P

Pharpe dijo...

Siempre pasa lo mismo cuando tienes algo novedoso la gente te aparece como por arte de magia xD

Saludos

Unknown dijo...

nadasepierde A veces es bueno no saber sobre ciertas cosas (porque cuando te enterás terminás comprando estos aparatitos y destruyendo tu hogar).

Ajenjo Es verdad. Y quién te saca la alegría de gritarle un tanto en la cara a la gente como si fueras Nalbandián? Son cosas que el dinero no puede comprar (!?)

Pharpe Para esa gente hay que poner reglas de convivencia, o directamente una buena patada donde no les da el sol.

Gracias por pasar...
saludos!

Malhumoretti y Neptuno dijo...

lejos, la mejor es la 5. no puedo parar de reirrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!

Osvaldo dijo...

Por lo que acabo de leer no sabía si reir o sentir pena por usted.

Parece ser usted una masa de carne hechada a perder, sin razón de ser, sin alegría, sin motivo alguno para divertirse.

Si va a escribir tonterias en el blog, le recomiendo mejor leer un buen libro o de plano hable con su marido o novio o pareja que la atienda como se debe y le aplique un buen revolcón.

Por favor deje divertir a los niños o ¿Usted no tuvo infancia?

Si de verdad le da cierto valor a este tema, acepte que se publiquen mis comentarios.

Sonríe un poco!

Unknown dijo...

Sr. Osvaldo o como usted se llame: Nos alegra saber que existe un adalid que lucha a favor de la alegría de los niños. Los últimos que conocimos fueron curas demasiado cariñosos, o payasos dados a las sustancias alucinógenas.

Lo que nos asombra es que, siendo usted un niño con barba, carezca de una de las principales características de la niñez: el buen humor. Un caso raro el suyo, sr Oslvaldo.

Por otro lado, si gusta de las cuestiones serias y la literatura, la que le recomienda leer un buen libro soy yo. Me extraña que un señor tan experimentado en dar lecciones como usted busque ese tipo de cosas en un blog como este.

Su comentario misógino y falto de educación lo presenta y lo precede. Es una alegría que así lo haga, de esta manera se hace más simple retirarle el saludo.

Hay millones de otros blogs que ansían tener lectores como usted. Este no es el caso.

Que le vaya bien, y suerte con su trabajito de vendedor de Wiis.

Saludos cordiales